Conoce las 4 Pautas de la Motivación
La mayor parte de nosotros no podemos elegir entre trabajar o no trabajar pero sí entre disfrutar, o no, mientras lo hacemos. Incluso sin necesidades económicas necesitamos trabajar por motivos adicionales. De la misma forma que existen 4 estilos de liderazgo, tenemos 4 pautas de motivación laboral: reto, pasión, prestigio y contribución:
Reto: Un reto muy frecuente para muchos puede ser la solvencia financiera. Enriquecerse es una consecuencia de la asimilación de riesgos en la toma de decisiones. R. Kiyosaki lo dice bien claro: 1) adquiera activos, lo que pone dinero en su bolsillo, no pasivos, lo que saca dinero de su bolsillo y 2) no trabajes para ganar dinero, ¡haz que tu dinero trabaje para ti! No lo malgastes o tendrás que trabajar más.
Pasión: Otro beneficio ansiado es el bienestar de sentirse bien y hacer sentir bien a los demás. “Hacer amigos e influir sobre las personas”, en base a la inteligencia emocional, creando relaciones de confianza con clientes, proveedores y colaboradores. El mundo deja de ser un lugar solitario cuando, a través de nuestro empleo, conectamos con otras personas intercambiando simpatía, empatía y respeto.
Prestigio: Importa más aún el disfrute mental basado en autovalorarse; una difícil forma de congruencia que surge del descubrimiento, desarrollo y ejercicio de los talentos naturales siguiendo principios y reglas. Este tipo de reconocimiento escasea, porque en su escasez está su valor. Cuando a Napoleón le preguntaron si su vida había sido feliz, el emperador respondió: “En total, no he tenido más de 6 días de felicidad”. Abderramán III, Califa de la “Perla de Occidente” (Córdoba) durante 50 años, ostenta el record en 14 días de pura y auténtica felicidad según relata en sus memorias. Cada vez que nuestros proyectos se hacen realidad vivimos un instante de grandeza, un sentimiento de máxima plenitud. Sin el trabajo (incluyendo arte o deporte) nos perderíamos esta inyección de autoestima.
Contribución: Finalmente, está la excelencia de la felicidad espiritual que busca el bien ajeno como si fuera el propio. Cuanto más abunde mejor para todos. Hemos de juzgar nuestro trabajo no por lo que nos cuesta realizarlo, sino por su beneficio para otros. El esfuerzo laboral cobra sentido cuando es el medio para enriquecer la vida de otras personas aportando protección, afecto, instrucción o disfrute. Esta es nuestra personal responsabilidad, nuestra inteligencia ética y la mejor de las 4 Pautas porque: “Quien no vive para servir, no sirve para vivir” (Madre Teresa de Calcuta).
Estar atentos ante las motivaciones de los demás, puede ser un vehículo muy efectivo para influir en nuestros asociados.
Efrén Martín es un experto en selección. Tiene una Maestría en Gestión de Recursos Humanos, es Profesor de la Universidad de Deusto y autor de 6 libros sobre desarrollo personal y profesional. Es Director de FVMartin, ubicado en Bilbao y es distribuidor de Reddin Assessments.